La palabra nos muestra que Jesús aparece primero a María
Magdalena después de resucitar, ella va hasta los discípulos y les contó lo que
había ocurrido, pero ellos no le dieron crédito. Entonces después de eso
manifestó de otra forma a otros dos discípulos, y de la misma forma los
discípulos fueron a anunciar para ellos, y todavía no estaban creyendo. Vivimos
días difíciles dentro del evangelio, y por más que parezca que la iglesia está
creciendo en realidad ella está hinchándose, pues los templos están llenos de
personas desesperadas por soluciones a sus problemas, pero no fue por eso que
Jesús se entregó en la cruz. El evangelio es algo tan simple de entender, pero
parece que muchos están siendo engañados porque quieren, pues la palabra es tan
clara sobre algunos principios, vemos que existen temas que la palabra aborda
de varias formas posibles, y aun así muchos acaban no dando crédito, o
entienden mal, o sólo sigue lo que es conveniente. La Biblia dice que la fe
viene por oír la palabra de Dios, entonces es importante ir a la iglesia,
escuchar la palabra, escuchar canciones que exalta a Dios, pero lo principal es
oír al Espíritu Santo, pues Él es quien no ayuda a cambiar, Él es quien nos
muestra qué camino debemos andar. Nuestro devocional diario en la palabra es
esencial para nosotros no sernos engañados con el evangelio de facilidad y
comodidad, pues el verdadero evangelio no se trata de paz, no se trata de nosotros,
el evangelio es una guerra, es espíritu contra la carne, es nuestra voluntad
contra la voluntad de Dios, es la lucha de no conformarse con los principios
que la sociedad intenta imponernos con los principios que nos llevan hasta al
Papá. Es tiempo de levantarnos como una generación sedienta por la palabra, en
comunión con el Espíritu Santo, y, que realmente busca la presencia de Dios en
su vida impactemos a nuestra nación.
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